EL SITIO DE MI RECREO

Quince años son difíciles de resumir en un breve relato sin que se haga aburrido. Reducir en pocas frases todas las vivencias, experiencias, anécdotas o recuerdos vividos durante esa época me llevaría demasiado tiempo y quizá, hasta mis escasos lectores quedarían abrumados. Pero, para que esto no suceda, hoy sólo voy a comentar alguna que otra cosilla de forma general...

El título del post tiene mucho que ver con la imagen que lo acompaña, y el sonido de fondo de El sitio de mi recreo de Antonio Vega, quizá me sirva de inspiración para rellenar este espacio.

Recientemente alguien me sugería que escribiera sobre el Colegio F.E.M, sobre sus clases, sus profesores, las horas de recreo, las obras de teatro... y, como de eso me gusta mucho hablar, he aceptado muy gustosamente el reto.

Por si alguien está despistado o por si lo ha olvidado, la foto lo dice muy clarito: Calle de la Loma. Ésta es la dirección de nuestro colegio. Hay quien dice que "La calle del olvido" de Los Secretos tiene su inspiración en esta calle puesto que, el tristemente fallecido Enrique Urquijo también fue alumno del Colegio F.E.M.

Los más viejos del lugar tendrán otros recuerdos, pero los que estuvimos allí entre el ochenta y tantos y el noventa y tantos, no podemos olvidar a Pepe el conserje dando palmas y llamándonos "¡¡¡¡¡¡¡A filas!!!!!!", al Sr. Peña tirando de las corbatas de "chicle" o citando su famosa frase de "ya has hecho el paseillo" cuando te sacaba a la pizarra y te mandaba a tu sitio después de tirarte un minuto con la tiza en la mano sin saber resolver el problema. Al Sr. Molina con sus largas, extensas y pormenorizadas explicaciones en la pizarra (ver video). A Pepe Baez durante el primer día de clase preguntándole a los nuevos "...¿y cual ha sido la razón para que vinieras al Colegio F.E.M?. A Don Javier con sus obras de teatro repletas de disfraces imposibles y surrealistas. Y a tantos otros que se han quedado con sus "motes y etiquetas".

¿Alguno no recuerda Autocares José Gonzalez S.L?. Pues sí, era el autobús de Pepe que tantos y tantos kilómetros hizo con nosotros por España y parte del extranjero, compartiéndo mil anécdotas graciosas y muchas horas de mus.

El coro del colegio, que yó conocí de manos de Don Rubén hacia el 1984, pasados los años se fue convirtiéndo en TUNA y de ellos no podemos olvidar el "Tu me enseñaste a volar con alas de pajarillo" que cerraba cualquer evento, ya fuera el concurso de villancicos de navidad o las obras de fin de curso.

Mención especial tienen los bocadillos de la hora del recreo (chocolate, jamón, mortadela, chorizo, salami y...nocilla!!!!) que sólo entregaban a aquellos que iban a comedor pero que, por suerte o por destino, a pesar de ser de "los de casa",casi siempre acababan en mi estómago gracias a mi labia y a la generosidad de las cocineras que siempre me trataron muy bien.

Quizá no tan agradable como lo anterior (sobretodo para los que más recibían), fueron aquellos recreos jugando al "AJO" y al "TUBO" cuando cualquier elemento esférico era suficiente para que hicieramos un ratito el animal sin preocuparnos de quienes no "jugaban" y pasaban por aquel minicampo de batalla. (Fui testigo de dos o tres momentos "brutales" que han sido recordados a carcajadas a lo largo de los años en múltiples conversaciones con hermanos y compañeros, pero que no me gustaría que viviera ninguno de mis hijos como protagonistas).

Y poco más porque al final me extiendo demasiado...

"...hablaba con nostalgia de la infancia... ¡¡que dura se ha vuelto la vida después!! (La Unión)

Como dice La Calle del Olvido: "...recordar lo que fue, y lo que pudo haber sido"

La Bamba

El curso de 4º de EGB con la Srta. Marillanos y la Srta. Juani había terminado. Habíamos abandonado el lápiz para empezar a escribir con boli (Bic naranja escribe fino, Bic cristal escribe nornal... ¡¡¡Dos escrituras a elegir!!!! Bic,.Bic, Bic, Bic, Bic!!!!!), habíamos aprendido a dividir, el verbo HABER, los ríos y las provincias de España... Nos habíamos comido alguna que otra bronca por utilizar el Bic a modo de cerbatana para lanzar arroz. Habíamos hecho noche en el Monasterio de Piedra como primera "excursión" durmiendo fuera de casa. Habíamos jugado como locos a los dados con billetes del Monopoly... Y LLEGABA EL VERANO!!!

Después del habitual mes de julio en la playa, durante el mes de agosto me tocó ir a Irlanda como habían hecho anteriormente mis hermanos.
Era la primera vez que viajaba en avión y mi hermano Alfonso me explicaba como se me taponarían los oídos por la presión. Me comí un chiche y me sentí "liberado". Aterrizamos en Dublín de madrugada y nos acercamos al colegio para que nos recogieran nuestras familias. Afortunadamente, hubo un problema con la familia que tenía que recoger a mi hermano Paco. Y digo afortunadamente, porque gracias a esa coyuntura, se vino a pasar la noche conmigo y pudo hacerme de traductor por unas horas. En esa casa residían Dolores, Jeff, James, Frank, John y Suzan, pero muchos de ellos la mayor parte del tiempo no estaban en casa. Coíncidí con Ruben y con Ana, dos hermanos españoles amigos de la familia que me acompañaron durante unos días y el 12 de agosto, después de hablar con mis padres, Pussy, (el gato de la familia) me arañó el brazo con una de sus garras, dejándome una cicatriz visible a día de hoy (Como podreis imaginar, desde entonces "dejamos de ser amigos").

Conocí a mi amigo GIL PANADÉS (¿como te llamas? GIL. ¿y de nombre? GIL!!). En la radio sonaba Madonna, en la tele me sorprendía Boy George, me enamoré de los dibujos de los Transformers y presencié por primera vez los combates de WWF donde Hulk Hogan era el rey del momento.

Pero por encima de todo, no paraba de escuchar en todos sitios la música de LA BAMBA como banda sonora de una película que se estrenaba y que reflejaba la vida de Ritchie Valens.

Ayer, 23 años después de aquel maravilloso verano vi la película y he de decir que me gustó. No es una gran película pero me gustó pensar que refleja parcialmente lo que fuera la corta vida del joven Ricardo Valenzuela.

Siempre quiso ser músico y lo consiguió. Luchó por el amor de una chica "imposible" y la conquistó. Le prometió a su madre que viviría en una gran casa y se la compró. La pena es que siempre pensó que tendría un accidente de avión y no se equivocó.

En mi últimos post hablaba de la excursión de 8º de EGB y, aunque no tiene nada que ver con la película, vuelvo a recordar ese maravilloso viaje por el norte de España porque durante aquella época yo escuchaba "Donna" y porque en aquellos ratos de soledad "descubriendo música" de algunos de los cd´s que había en casa, descubrí algunos de los grandes éxitos de los años 50.

Los años van pasando y los recuerdos no se olvidan...